Pierde Esmeralda Cárdenas documentos de ex braceros acusa Miguel Zepeda

PEDRO PUENTE PÉREZ | Colima | 23/02/2011

El Presidente del Consejo Estatal de Exbraceros del Estado de Colima, Miguel Zepeda Velázquez, acusó a la ahora delegada en Colima de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y ex diputada federal Esmeralda Cárdenas Sánchez, de haber extraviado documentos de los ex braceros que son indispensables para acreditar y poder cobrar el dinero les corresponde.

El dirigente recordó que cuando Esmeralda Cárdenas cuando fue diputada ofreció a los ex braceros que les iba a pagar en un plazo máximo de dos años, pero esto a cambio de su voto.

“Ha pasado tanto tiempo y ha perdido el interés de ayudarlos al grado que incluso ha reconocido que perdió documentos de los ex braceros que son indispensables para acreditar que el dinero les corresponde y ahora no podrán reponerlos porque ella los extravió”, dijo.

Ante esto, agregó que la gente esta enojada y desesperada e incluso se dejaron de hacer reuniones mensuales aunque de lo que se trataba era de darles aliento de alguna forma para que sigan con vida y puedan cobrar.

Auguró Zepeda Velázquez que parece que esta situación, al menos en el caso de Colima, va a seguir trabada porque el gobierno es diferente al que tiene el poder a nivel federal, “incluso en los sorteos para hacer los pagos salen muy pocos ex braceros”.

Señaló que parece que el gobierno federal alarga la espera para pagar a los ex braceros como si esperara que en este lapso muera no solo el beneficiario directo, sino también sus hijos y ya nadie reclame nada.

Llamó a Esmeralda Cárdenas a que deje de promocionarse en la prensa con foros y desplegados, casi todos los días, y mejor utilicen ese dinero para pagarle a los ex braceros, “es una tristeza como se ha manejado el dinero que le pertenece a los viejitos”.

Zepeda Velázquez recordó que les deben dinero de sus ahorros a casi 400 ex braceros a quienes les dieron una parte de ese capital y que no han podido cobrar porque en México, “no han podido arreglar los problemas de captura de sus nombres o algún otro dato personal, situación que ellos mismos generaron, para poder cobrar cuatro mil miserables pesos”.