El acoso callejero es un problema social poco visibilizado en nuestra sociedad

Administrador Colimapm | Colima | 06/12/2015

*Analizan violencia contra las mujeres en espacios públicos, en la U de Colima *“La violencia en el ámbito público ocurre en las calles, en las plazas, en las escuelas, en los lugares de recreación, en el trabajo, entre otros. En las calles, los hombres dicen piropos a las mujeres: ‘¡Mira, qué buena se ve!’, ‘¡Qué sabrosa estás!’, los cuales son tolerados por el Estado y las demás personas”: Conferencista

Con el objetivo de visibilizar y sensibilizar sobre el impacto de la violencia de género en el espacio público, y para el desarrollo integral de las mujeres y de la sociedad colimense, se realizó este fin de semana la I Jornada “Violencia en el espacio público: una problemática de género” en la Universidad de Colima.

La jornada fue inaugurada por el delegado del campus Colima, Celso Armando Ávalos Amador, quien dijo que esta actividad se realizaba en el marco de los 16 días de activismo por la eliminación de la violencia hacia la mujer.

Comentó que el acoso callejero es un problema social poco visibilizado en nuestra sociedad, y que la Universidad de Colima, el Colectivo “Calles sin acoso”, el Centro de Apoyo a la Mujer “Margarita Magón” y la Asociación Colimenses de Universitarias unían esfuerzos para cambiar las actitudes que menosprecian y denigran a la mujer.

La directora del Centro Universitarios de Estudios de Género de la Universidad de Colima, Azucena Evangelista Salazar, comentó que esta acción es parte del compromiso social de la institución educativa de transversalizar la perspectiva de género entre el estudiantado y trabajadores, y de formar alumnas y alumnos con valores y sensibilidad ante la indiferencia.

La primera conferencia fue impartida por la directora del Centro de Apoyo a la Mujer “Margarita Magón” A.C., del Distrito Federal, María del Rocío Corral Espinoza; se tituló “Manifestaciones de la violencia de género en el espacio público”.

Ella expuso que los espacios públicos de todos los países, de alguna manera, han sido negados a las mujeres; “se tuvo que luchar para que las mujeres pudieran estudiar y ocupar espacios públicos, lo cual no quiere decir que, como ya tenemos los espacios vivos en igualdad, haya equidad. Ahora es necesario enfrentar otro tipo de situaciones, en las cuales se tiene que luchar para ganarse la equidad en los espacios”.

Manifestó que, en el ámbito público, “todos ven la violencia, todo mundo puede ser testigo y la tolera; en determinado momento, se dice ‘ella tuvo la culpa por traer una falda tan corta, por caminar sola de noche, por dar la pauta…’, y lo más grave es que se siga tolerando”.

La violencia en el ámbito público, dijo, ocurre en las calles, en las plazas, en las escuelas, en los lugares de recreación, en el trabajo, entre otros; “en las calles, los hombres dicen piropos a las mujeres: ‘¡Mira, qué buena se ve!’, ‘¡Qué sabrosa estás!’, los cuales son tolerados por el Estado y las demás personas”.

Lo anterior tiene que ver, señaló, “con el poder que se le ha dado a lo masculino para tomar el espacio público de la calle; entonces, el hombre puede ser dueño de la calle, pero también de quienes transitan por ella”.

Dijo que, entre los mitos y estereotipos, se dice que las mujeres quieren decir que ‘sí’, pero dicen que ‘no’ para hacerse del rogar; “esto es parte de los roles y estereotipos que han reforzado la violencia contra el género femenino”.

Finalmente, señaló que los trabajos tampoco son espacios seguros para las mujeres, ya que muchas veces sufren los comentarios: “¿Por qué será jefa? Seguro se acostó con alguien. ¿Para qué la contratamos si tiene marido y la mantiene?; lo anterior descalifica a las mujeres para que se incorporen al espacio laboral”.