Gobierno del Estado atiende casos de hepatitis en Cereso

Administrador Colimapm | Colima | 29/11/2015

*Gobernador instruye entregar a la Comisión Estatal de Derechos Humanos una investigación pormenorizada del tema

La Secretaría de Salud y Bienestar Social en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Estado informan que se lleva a cabo una atención integral a los casos de insuficiencia hepática que se han presentado en el Cereso de Colima.

El Gobernador del Estado, Ramón Pérez Díaz, ha solicitado una investigación pormenorizada del tema, para deslindar cualquier tipo de responsabilidades al respecto y ha solicitado que se entregue toda la información disponible a la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que sea partícipe, además de de que se mantengan todas las acciones en materia de salud y protocolos en materia de seguridad pública que sean necesarios para atender la problemática.

Por parte de la Secretaría de Salud se mantienen las medidas de atención médica, contención sanitaria y vigilancia epidemiológica, así como de promoción de la salud en el Cereso.

Se realizan diversos estudios de laboratorio a internos del Cereso, de las 28 pruebas efectuadas hasta el momento, ya se han detectado 20 casos, 1 presentó hepatitis B, 12 presentaron hepatitis C y 7 hepatitis B y C.

De los 20 casos referidos, 10 internos han derivado en hospitalizaciones, de los cuales fallecieron 5 por insuficiencia hepática aguda (hepatitis tóxica), 3 fueron dados de alta por mejoría y 2 mantienen atención hospitalaria.

Las cinco personas fallecidas por hepatitis fulminante, se estudia la posible aceleración de la sintomatología hepática por el consumo de sustancias ilícitas, las cuales pudieron ser rebajadas o alteradas con materiales o productos tóxicos. Los nombres de los fallecidos no se revelan por respeto a los familiares, pero fueron informados a la Comisión Estatal de Derechos Humanos.

Los otros 10 reclusos están siendo atendidos en el Centro Penitenciario por personal médico de la institución, sin que hasta la fecha sea necesaria su hospitalización. Al no adquirirse la enfermedad por el contacto cotidiano, no ha sido necesario su aislamiento, únicamente se les trasladó a dormitorios cercanos a la unidad de salud del Cereso, para una mejor atención.

Cabe mencionar que no se ha presentado ni un solo caso de Hepatitis A, que es la única que se transmite por vía fecal-oral, principalmente a través de agua o alimentos contaminados.

El Gobierno del Estado mantiene especial atención a esta situación e implementa diversas medidas, principalmente:

Atención médica con internamiento hospitalario a los diez pacientes ya mencionados, consulta externa con médico especialista gastroenterólogo a los demás y servicios de salud las 24 horas y los 7 días de la semana para cualquier interno que presente alguna complicación de salud.

Se realizó medición de la cloración de el agua que se encuentra bajo norma, el uso final de excretas y aguas negras, encontrándose dentro de norma, se tomaron muestras de alimentos y los resultados se entregan la próxima semana.

El Laboratorio Estatal de Salud Pública realizó tomas de muestras de hepatitis B, C, entre otras; con los reportes ya comentados y se realizarán más pruebas a pacientes hasta terminar con el grupo a estudiar.

El Centro Estatal Contra las Adicciones (CECA) envió personal médicos y de psicología para realizar intervenciones de prevención promoción y atención de las adicciones a quienes de manera voluntaria se integran a grupos de recuperación. Además, se mantendrán los estudios epidemiológicos de los casos y sus contactos.

Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública informa que se han reforzado las medidas de seguridad, vigilancia, control interno así como del acceso al centro penitenciario.

De la investigación preliminar se prevé que las sustancias ilícitas han sido ingresadas al Cereso por visitantes de los internos en partes de su cuerpo que por respeto a sus derechos humanos no es posible revisar.

Dichas sustancias ilícitas habrían sido mezcladas por los propios reclusos con algún producto tóxico para rebajarlas, lo que podría haber acelerado el deterioro de la salud de los casos de personas fallecidas.

Ante esta situación, se mantiene la investigación y se llevan a cabo charlas de sensibilización tanto con internos como con familiares y visitantes de los mismos para explicarles los riesgos que representa el intentar ingresar sustancias ilícitas.