Una Universidad es para educar y no para servir como caterva de ladrones

JOSÉ GILBERTO IBÁÑEZ ANGUIANO | Colima | 11/06/2014

*Quienes optan por callarse son cómplices de la existente corrupción en la UdeC, afirma José de Jesús Lara Chávez

El fundamento y la razón de ser de una Universidad es educar para la libertad, allí radica su autonomía y no servir como caterva de ladrones, por un lado las amenazas, el chantaje, el hostigamiento y el acoso laboral y por el otro, las dadivas, los obsequio y las prebendas.

En esos términos se expresó el profesor investigador José de Jesús Lara Chávez del Centro Universitario de Investigaciones Biomédicas de la Universidad de Colima, mediante rueda de prensa que tuvo un retraso de una hora con 20 minutos efectuada este miércoles en el Jardín Libertad en la que estuvo acompañado por Ricardo Antonio Navarro Polanco, integrante del Comité de Huelga del SUTUC.

Del mismo modo, leyó un documento en el que aseveró que los profesores con indolencia, apatía, resignación y sus muestras de indiferencia ante la corrupción que caramente existe en la Universidad de Colima y que optan por callarse, son cómplices del delito pues “no son capaces de defender sus derechos y sus conquistas laborales”.

Exhortó a los docentes de la máxima casa de estudios, a que se sumen a la lucha pacífica que realizan los huelguistas, “luchemos por una Universidad libre, nos la merecemos y pongamos orden a este conflicto, pues orden significa justicia y mientras no haya tal, seguiremos emergidos en la injusticia”.

Lamentó que prevalezca la negativa de parte de Gobierno del Estado por dar solución a este problema que sigue en aumento.

Mencionó que el día 29 de abril del 2014 se declaró en huelga de hambre y se levantó con la dignidad en alto por no haber ingerido alimentos en un lapso de 39 días.

Subrayó que el hecho de desvirtuar la huelga mediante el morbo, es un ejercicio degradante para tratar de cambiar el foco de atención que sustenta el acto.

Para terminar, José de Jesús Lara, dijo que dejar de comer se supera a los tres o cuatros días, “dejas de tener hambre y entrar en un estado de saciedad, lo más difícil de superar es el sufrimiento que le infringes a tu familia y a tus seres queridos, la huelga de hambre te convierte en un ser egoísta, después de cuatro días de huelga no se vale hacer sufrir a la gente que más amas esto nunca lo pensé y aún me duele, les pido perdón por ser injusto pues de oprimido paso a opresor”, concluyó.