
Angel Méndez
COAHUAYANA, Mich.- Un alud de quejas de habitantes del municipio, principalmente amas de casa, son las que se han recibido en la corresponsalía en la costa / sierra nahua michoacana por el aumento al precio de la tortilla acordado entre un grupo de cuatro regidores y los tortilleros, quienes sin ningún miramiento para la gente pasaron a afectar a los coahuayanenses en general.
Argumentando un incrementos en el alza de los insumos, los regidores María Isabel Mendoza Mejía, Miguel Villegas Cervantes, Teresa Vega Mondragón, y Antonia Durán Barragán, acordaron y avalaron con su firma que el precio por kilo de la tortilla comprada en el negocio quedó en 14 pesos si llevan servilleta, 15 pesos envuelta en papel, y 16 pesos en las tiendas. Para la masa fijaron el precio en 10 pesos el kilo y los sopitos a 16 pesos.
Tras la firma de este aval al precio de la tortilla, el Ayuntamiento de Coahuayana publicó en su página web un aviso urgente en el que difunde el acuerdo con empresarios para el precio de la tortilla, el que está firmado por Antonia Durán Barragán, regidora de Comercio y Fomento Industrial.
Entre otros muchos reclamos de los quejosos, cuestionan a los cuatro regidores firmantes del acuerdo, tres de los cuales son de un partido diferente al que gobierna en Coahuayana, a los que acusan de autorizar el incremento al precio de la tortilla sin tener facultades para ello; de no defender a la población de la voracidad de los tortilleros; de insensibilidad social al ignorar la fuerte crisis económica que padece la mayor parte de los habitantes del municipio; y en general, “de valerles madre” la gente porque ellos ganan más de un mil pesos diarios.
También se acusó, sin pruebas, a un funcionario municipal de primer nivel ex propietario de una tortillería, de ser el promotor de este acuerdo con los tortilleros avalado por los regidores.
Además, se pidió la intervención de la Profeco para que por primera vez en la historia vengan a Coahuayana a hacer algo por la gente, revisando las básculas de las tortillerías y metiendo en cintura a los tortilleros que lucran con el hambre de los coahuayanenses incrementando el precio de este producto básico en la alimentación que es la tortilla.
Asimismo anunciaron que buscarán organizarse para traer tortillas de las tiendas de autoservicio de Tecomán, donde el kilo cuesta un poco más de la mitad de lo que vale en Coahuayana.
Finalmente, se preguntó al alcalde Andrés Cárdenas Guerrero en donde quedó la cruzada en contra el Hambre, y se solicitó que el Ayuntamiento de Coahuayana se ponga al lado de la gente, y que en este tipo de casos ayude a los tortilleros no avalando aumentos de precios sino organizándolos para que en conjunto hagan compras de mayoreo que les permitan abatir sus costos, o también apoyándolos económicamente con una cooperación del sueldo de los regidores para el pago de algunos de los gastos de los productores de tortillas.
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