Se realiza la primera Procesión del Silencio a la usanza Sevillana en Colima

PEDRO PUENTE PÉREZ | Colima | 30/03/2013

Cientos de personas, o talvez miles, salieron a presenciar la primera procesión del silencio a la usanza Sevillana que se llevó a cabo la noche de este viernes Santo por la avenida Felipe Sevilla del Río de esta ciudad de Colima, con lo que se busca rescatar esta tradición para el bien de los colimenses, perdida desde los años 20 del siglo pasado.

Esta procesión del silencio fue organizada por la Fundación Lo Mejor de Colima, presidida por Roberto Moreno Béjar.

La procesión inició minutos después de las ocho de la noche en el cruce de la avenida Felipe Sevilla del Río y Boulevard Camino Real, en donde salieron los 70 participantes caminando poco a poco al ritmo que marcaban los 15 tambores, que fueron vistos por quienes se juntaron en las banquetas y camellones de la avenida para ver pasar esta procesión del silencio.

Así, paso a paso, el contingente avanzó encabezado por los “soldados romanos” con sus trompetas, seguidos por los tambores que eran tocados por los encapuchados para dar paso al cuerpo crucificado de Cristo cargado en hombros por cuatro “penitentes”; posteriormente la virgen La Dolorosa también era cargada en hombros seguida por “los cruzados”, que son los defensores para dar luz al cuerpo crucificado; la procesión del silencio fue cerrada por un grupo de personas que, sin hablar, siguieron al contingente hasta llegar a su destino final, en el cruce de la propia avenida Felipe Sevilla y Constitución.

A decir de su organizador, Roberto Moreno, la respuesta de la gente fue mucho mejor de la imaginada, “tuvimos una sorpresa tanto de participantes como de asistentes, fueron 70 participantes y necesitamos calcular cuanta afluencia de personas hubo en el transcurso de la procesión, pero fue un número importante de gente”.

Indicó que la Fundación Lo Mejor de Colima “va a seguir en esta encomienda que nos hemos fijado de rescatar, difundir, fomentar y de organizar tradiciones y costumbres que hayan desaparecido ó fortalecer las que ya tenemos”.

Esta procesión es de origen sevillano, español, y a la llegada de los españoles en algunos lugares de México se arraigaron, “aquí en Colima ya se tenía esta procesión del silencio, pero en los años 1928-1929, en plena guerra cristera se canceló, pero no se reiniciaron, por lo que a casi 80 años que esa tradición murió, ahora le estamos dando vida otra vez”, puntualizó.