LECTURAS

NOE GUERRA PIMENTEL | Opinión | 24/03/2013

DÍAS DE GUARDAR (repaso bíblico)

Fue el jueves, el de la celebración de la llamada última Cena, el acontecimiento que ha inspirado a los grandes artistas de todos los tiempos, el mismo día en el que, según, Jesús hizo el lavatorio de pies, celebró la llamada eucaristía e instituyó el sacerdocio antes de su retiro al Huerto de Getsemaní. Esa mañana, en las catedrales, el obispo reúne a los sacerdotes y, en Misa, consagra los óleos sacramentales: bautismo, confirmación, orden sacerdotal y unción a enfermos. En la misa vespertina, antes de iniciarla, el sacerdote toma toalla y bandeja con agua para lavar los pies a doce varones, recordando el pasaje bíblico.

La eucaristía. Es, a la vez que elemento de salvación, el sacramento del Cuerpo y la Sangre de Cristo bajo las especies de pan y vino. Todos los cristianos están invitados a celebrar la cena. Esta noche, Jesús les ofrece su Cuerpo en el pan y su Sangre en el vino. Acto que simboliza el compromiso de servir a los demás. El lavatorio de los pies, según el catolicismo debe recordarnos la humildad para servir con convicción y como el mejor camino para seguir el ejemplo de Jesús como acto de fe.

La noche en el huerto de los Olivos. Este, según Marcos14, 32-42.: Es un llamado a la reflexión sobre nuestros sentimientos y emociones: miedo, angustia, tristeza, soledad, compromiso, obediencia, resignación, confianza, además de generosidad y humildad. El día de la Caridad. En México, se ha establecido que el Jueves Santo sea el de la caridad. El objetivo no es llevar a cabo una colecta para pobres, sino debe ser el de seguir el ejemplo de Jesús que compartió todo.

Viernes Santo. Se recuerda el sacrificio terreno de Jesús para quitar el pecado a la humanidad y asegurarnos la trascendencia. Se lee la pasión de Cristo en la liturgia de la Adoración a la cruz. Ese día no se celebra Misa. En las iglesias, las imágenes se cubren con tela morada al igual que el crucifijo y el sagrario está abierto en señal de duelo pues Jesús no está. El morado en la liturgia católica significa luto. Se viste de negro la imagen de la Virgen por la muerte de su Hijo. Se rememora leyendo a Juan, capítulo 18, vers. 1-19, 42.

Este día se puede guardar, según los católicos, con ayuno y abstinencia y se reza el Vía Crucis, igual se participa en la liturgia de adoración, pues se trata de acompañar a Jesús. A las tres de la tarde, se recuerda la crucifixión de Jesús con el rezo del Credo. El sermón de las Siete Palabras (frases). Es la reflexión de las últimas palabras que el nazareno pronunció en la cruz: "Padre: Perdónalos porque no saben lo que hacen" (Lucas 23, 24)/ "Yo te aseguro, hoy estarás conmigo en el paraíso" (Lucas 23,43)/ "Mujer, ahí tienes a tu hijo. Ahí tienes a tu Madre" (Juan 19, 26-27)/ "Dios mío, Dios mío ¿por qué me has abandonado?" (Marcos 15, 34)/ "¡Tengo sed!" (San Juan 19, 28)/ "Todo está consumado" (Juan 19, 30)/ "Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". (Lucas 23, 46).

Sábado Santo. El sábado por la noche y el domingo en la madrugada una mujer se ve desconsolada por la muerte de su hijo. Su ser ha sido terriblemente conmovido por lo que ha visto esos últimos días ¿Cómo impedirle el sufrimiento y el llanto? Su penar no era menor, había pasado por la más traumática experiencia que una mujer puede tener, la de sobrevivir a un hijo y lo había enfrentado con temple y dignidad, no obstante su quebrado corazón.

Domingo de Pascua o de resurrección, es la fiesta más importante para los católicos, ya que cuando con la presencia omnímoda de Jesús, la religión católica adquiere sentido. Cristo triunfó sobre la muerte y con ello abrió las puertas del Cielo, según se dice. En la misa de ese día se recuerda de manera especial esa alegría con el encendido del Cirio Pascual que con su luz representa al Cristo resucitado, mismo que permanecerá prendido hasta el día de la Ascensión. Con la Resurrección de Cristo, se celebra la liberación individual. La derrota del pecado y de la muerte. Pablo dice: “Si Cristo no hubiera resucitado, vana seria la fe” (I Corintios 15,14).

RECADITO: Un llamado a los servicios de socorro y auxilio, con su presencia y activismo durante estos días legitiman y justifican aún más su importante función.