Producción de coco, alternativa viable para limoneros afectados por el HLB: Mely Romero

Administrador Colimapm | Tecomán | 24/03/2013

Tecomán, Col. La producción de coco y el desarrollo de todo el Sistema Producto Coco es una gran área de oportunidad para reconvertir los cultivos luego el enorme daño ocasionado por el HLB o dragón amarillo. Los resultados están a la vista y existen buenos proyectos de crecimiento que permitirán un importante desarrollo de esta cadena productiva.

En eso coincidieron la senadora Mely Romero Celis, el presidente del Consejo Estatal de productores de Coco de Colima, José Saúl de Santos González y el presidente del Sistema Producto Coco, Felipe Peña Ochoa, luego de realizar un recorrido por 2 industrias de coco: Deicoco en Tecomán y Coco Imperial en Armería, empresas generadoras de más de 150 empleos directos que han impactado positivamente la actividad productiva y económica de coco en la costa del estado, al generar una diversidad de productos como coco deshidratado, coco al alto vacío, crema y leche de coco orgánica, que en su mayoría exportan desde hace varios años bajo procesos de calidad certificados.

En reuniones de trabajo, De Santos González y Felipe Peña expusieron a la senadora Mely Romero las necesidades del sector. Explicaron que el estado cuenta con 14 mil hectáreas de coco, producto del cual viven 850 productores que generan, entre jornaleros e industriales, alrededor de 40 mil empleos indirectos.

Señalaron que la palmera de coco es el cultivo más sostenible de Colima, ya que tiene una vida de producción ininterrumpida de 100 años durante todo el año, debido a su floración. Soporta huracanes, inundaciones y además embellece las costas y las convierte en grandes pulmones gracias a su producción de oxígeno.

Mencionaron que los productores de coco se enfrentan a muchos problemas, siendo los principales la baja rentabilidad para los productores primarios y la plaga del Picudo Prieto.

José Saúl de Santos y Felipe Peña comentaron la necesidad de repoblar las palmeras ya existentes, pues actualmente la población es de 50 a 70 palmas por hectárea, siendo además palmeras viejas, por lo cual el objetivo es contar con una población de entre 150 y 180 palmas por hectárea y al aumentar la población se logrará un cultivo más rentable. Precisaron que la meta es plantar 100 mil palmas por año, durante cinco años.

Los cococultores e industriales, indicaron que en Colima tenemos gran parte de la industria nacional de transformación del coco, pero con una infraestructura muy carente. En algunos sectores la maquinaria es obsoleta y en otros, insuficiente, por lo cual se necesitan más recursos para mejorar la industria ya existente e impulsar diversos proyectos. Hay productores que buscando dar valor agregado a su producto han incursionado en este sector de la cadena, con resultados favorable, pero requieren de apoyo.

Agregaron que es necesario fortalecer la cadena productiva del Sistema Producto Coco en todos sus eslabones, desde la producción primaria, hasta la entrega del producto final, dando apoyo a productores, industriales, tanto existentes como emergentes y tecnificando el sistema a lo largo del mismo.

Mely Romero ofreció al presidente del Consejo Estatal de Coco y al presidente del Sistema Producto Coco apoyarlos para retomar diversos proyectos productivos y buscar formas de financiamiento; destacó además que es un cultivo que ya conocen los productores que le brindaría una ventaja ante los cultivos que se están introduciendo y que desconocen su manejo; también resaltó que con base en el potencial productivo y la mejora paulatina en el precio, puede ser una alternativa viable para un importante sector de la costa del estado.

Les pidió tener listos esos proyectos para darles seguimiento y tener una reunión con el titular de la Sagarpa, además de contar con el respaldo del Gobierno del Estado para apoyar a los productores de coco, pues reiteró que este puede ser un cultivo estratégico para el estado.

También reconoció los avances que tienen diversas industrias, pues lo importante es no sólo producir, sino darle un valor agregado al producto y poder comercializarlo, lo que ya han logrado.

Añadió que es fundamental destacar el impacto social que puede tener el fortalecimiento de esta cadena productiva y valorar que en la medida que se apoye a los productores e industriales se genera un importante número de empleos directos e indirectos, en beneficio de la población de la costa colimense.