PERGAMINO BALOMPÉDICO

ALEX CARBAJAL BERBER | Opinión | 31/01/2013

Lavolpe

Ricardo Antonio Lavolpe ha sido uno de los técnicos más polémicos en la historia moderna del futbol mexicano, que ni duda cabe. Ha sido además, uno de los más visionarios, más propositivos y el que ha dejado un legado táctico más perdurable, el cual va mucho más allá de los títulos y trofeos conseguidos en los distintos clubes donde entrenó, sin descartar la propia selección nacional mexicana.

Ahora que una enfermedad parece alejarlo de manera indefinida de los banquillos, se debe resaltar la herencia que la particular forma de entender este juego ha dejado al balompié mexicano. Empecemos por lo primordial: el estilo de juego. El subcampeón Atlas de 1999, dirigido por Lavolpe, quizá sea el club mexicano que mejor ha jugado en la historia moderna. Ese cuadro plagado de jóvenes revolucionó la liga mexicana, y solamente fue vencido por un cuadro de Toluca que tenía en la cancha a jugadores ya consolidados, como por ejemplo, José Saturnino Cardozo, y no por mucho, si no por penaltis.

De esa escuadra salieron futbolistas emblemáticos, pero el más fue Rafa Márquez. El mismo defensor del Barcelona campeón de dos Ligas de Campeones de Europa, declaró que al momento de asumir el cargo del banquillo culé Pep Guadiola, el catalán indagó con él sobre la forma de “salir jugando” de los equipos lavolpistas.

También, recordemos el paso de Lavolpe con la selección con un torneo donde el cuadro azteca lució un futbol de antología: la Copa Confederaciones 2005. Sin tener tantas figuras a su disposición, el argentino encontró algunos jóvenes que causaron impacto y se consolidaron en un torneo donde faltó muy poco para dejar en el camino a los argentinos. Un año después, en el Mundial de Alemania, México caería nuevamente ante Argentina, pero gracias a un gol magistral de los albicelestes, y no dejando una imagen paupérrima como la mostrada por el México versión 2010 de Javier Aguirre.

Para no extendernos mucho, otro gran ejemplo del legado que dejará Lavolpe para el balompié nacional, es Andrés Guardado. Cuando en el Mundial de Alemania algunos se mofaron de que lo haya puesto de titular al ahora jugador del Valencia, contra los argentinos en octavos de final, pocos imaginaban que el zurdo iba a hacer mucha falta tras su salida por lesión en ese partido. Este movimiento desorientó al rival, quien se vio superado tácticamente por México, al contrario de la versión 2010, cuando la presencia del “Bofo” Bautista en el campo supuso, ahora sí, un tema de risa.

Aunque también hay muchos aspectos negativos de Lavolpe, como puede ser su soberbia, lo incuestionable es que su calidad como entrenador y desarrollador táctico se va a extrañar en nuestro futbol. Es una de esos técnicos que tienen la habilidad y la sapiencia para dejar legados tangibles y perdurables.