Comala, Col. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) liberó en su medio natural un ejemplar de boa constrictor de 1.20 metros de largo y un peso aproximado a los 3 kilogramos, mismo que fue entregado de manera voluntaria por un particular de la localidad de Ocotillo, municipio de Cuauhtémoc.
La liberación correspondiente se efectuó en el predio conocido como “La Barranca”, en la comunidad de San Antonio, municipio de Comala, y para lo cual se referenciaron las coordenadas geográficas.
Dicho ejemplar de fauna silvestre causaba daños en el predio de la persona que la entregó voluntariamente a esta Procuraduría, dado que a últimas fechas comenzaba a comerse animales domésticos de su propiedad.
Cabe señalar que la boa constrictor es una especie de reptil escamoso de la familia boidae. Es nativa de América, desde Argentina hasta el norte de México. Sólo la subespecie boa constrictor posee el final de su cola de un color rojizo.
Vive en hábitats con poca cantidad de agua, como desiertos y sabana, a la vez que se la puede encontrar en bosques húmedos y terrenos de cultivo, lugar éste último similar en donde fue liberado. Es un reptil tanto terrestre como arbóreo.
Llega a medir hasta 4 metros, dependiendo de la subespecie y el sexo, siendo la hembra normalmente mayor que el macho. Presenta una atractiva coloración que consiste en superficies dorsales de tonos rojizos que quedan dentro de un fondo que puede ser blanco, rosado, marrón o dorado, dependiendo de la subespecie o los cruzamientos llevados a cabo en cautividad. Durante los días próximos a la muda, la serpiente adquiere una piel de color grisáceo poco vistosa y sus ojos se vuelven de color blanco cremoso.
Es un animal solitario y nocturno. Pasa el día escondido entre las ramas de los árboles o en algún tronco hueco y sale a cazar al caer la noche. Le gusta trepar a los árboles y tender desde allí emboscadas a sus presas. También baja al suelo con frecuencia en busca de agua y es buena nadadora. En su alimentación lagartos, pájaros de tamaño moderado, zarigüeyas, murciélagos, ratas y ardillas.
Al llegar la época de reproducción, la hembra comienza a secretar feromonas a través de su cloaca para atraer a los machos. Adquiere una posición rígida característica mientras el macho se mueve lentamente a su alrededor, siempre atento a sus movimientos. Cuando la hembra se muestre receptiva, el macho comenzará a pasar por encima de ella y a constreñirla suavemente. La hembra no ovulará hasta que no haya dado comienzo este cortejo.
Al respecto, el Delegado de la Profepa, Alberto Eloy García Alcaraz, afirmó que seguirán protegiendo las especies de fauna silvestre y sobre todo aquellas catalogadas en peligro de extinción bajo una política de cero tolerancia, tal como lo ha instruido el Procurador Federal de Protección al Ambiente, Francisco Alejandro Moreno Merino.
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A partir del Lunes 11 de Abril de 2011
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