Manzanillo, Col. A pesar de las advertencias médicas y los riesgos a la salud, un número considerable de personas que acuden al Centro de Integración Juvenil (CIJ) Manzanillo continúan consumiendo nicotina a través de vapeadores, sin intención de dejarlo.
Miriam Urzúa, directora del CIJ en este municipio, advirtió que el uso del vapeador sí representa un daño real a la salud, especialmente a nivel pulmonar, y que actualmente se tiene registro de al menos 90 personas que han sido usuarios de sus servicios, reconocen su consumo, pero que no desean dejarlo, a pesar de los efectos perjudiciales.
“El vapeo daña la salud y la capacidad pulmonar, y aunque los usuarios lo aceptan, muchos no están bien interesados en abandonar el hábito”, puntualizó Urzúa.
Para quienes desean hacerlo, el CIJ cuenta con un programa especializado para dejar de fumar, el cual se imparte todos los jueves a las 13:00 horas, con una duración de 10 sesiones. Antes de iniciar, se realiza un diagnóstico médico, se elabora un historial clínico y se aplica un estudio socioeconómico, con el objetivo de brindar una atención integral.
La directora subrayó que el centro cuenta con la capacidad necesaria para diagnosticar el estado de salud pulmonar de los usuarios y acompañarlos en el proceso de abandono del consumo de nicotina.
El CIJ hace un llamado a la población a informarse, tomar conciencia y buscar ayuda profesional para dejar de vapear y proteger su salud a largo plazo.
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A partir del Lunes 11 de Abril de 2011
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