Una erupción del volcán de Colima puede ser advertida hasta con dos semanas de anticipación: Raúl Arámbula Mendoza

Administrador Colimapm | Colima | 04/03/2024

*Los sismos generados por el volcán no son percibidos por la población, se reflejan solo en el edificio volcánico *Los sismos que nosotros percibimos son de origen tectónico

Luego de señalar que el volcán de Colima se encuentra monitoreado, Raúl Arámbula Mendoza, investigador y Director del Centro Universitario de Estudios Vulcanológicos, dio a conocer que con los instrumentos con que se cuenta en estos momentos, un evento eruptivo del coloso puede ser detectado hasta con dos semanas de anticipación.

Al respecto señaló que “con los instrumentos que tenemos nos pudiera dar, inclusive, una o dos semanas cuando el proceso (eruptivo) no es tan rápido; hay procesos que son muy rápidos y en este caso pudiera darse un aviso de uno o dos días”.

Explicó que “el magma para llegar a la superficie genera diferentes manifestaciones, una de ellas son los sismos, pues el magma al acercarse a la superficie genera sismicidad y uno de los principales monitoreo que tenemos es el de tener sismómetros alrededor del piso volcánico, que nos avisan cuando el magma está subiendo; tenemos también cámaras de video, equipos para medir la deformación, ya que si el volumen de magma es muy grande el edificio volcánico se va a deformar y eso también lo podemos medir”.

Agregó que afortunadamente hay muchas herramientas para la vigilancia de los volcanes y los avisos pueden ser con días y hasta semanas.

Cuestionado sobre la sismicidad ocasionada por el volcán de Colima, Arámbula Mendoza explicó que “los sismos que generan los volcanes generalmente son de baja magnitud y solo se refleja en nuestro monitoreo… generalmente los sismos que genera nuestro volcán no son percibidos por la población”.

El investigador indicó que “los sismos que nosotros percibimos son de origen tectónico, tienen que ver con la interacción de las placas tectónicas, sobre todo la placa de Cocos con la placa de Norteamérica o la placa de Rivera y esos son los sismos que han afectado a Colima, Michoacán y Jalisco, son sismos de gran magnitud, generados principalmente en la zona costera”.