ENTRE EL PAN Y EL CAFÉ 1

PEPE NARANJO | Opinión | 17/04/2012

Breve Historia de Comala (Parte I)

El profesor Rubén Jaime Valencia Salazar es un personaje muy apreciado en Comala, nuestro bello Pueblo Blanco de América, Mágico de México y cuna de Pepe Naranjo, hoy reconocido oficialmente a nivel nacional como “El Mejor Pueblo Mágico de México”. Miembro de una estimada familia, siempre se ha distinguido (al igual que su hermano, el ex alcalde Jesús Valencia) por su amor al terruño, buen sentido del humor y por ser un acucioso investigador de los orígenes de nuestro municipio.

Lo conozco desde mi infancia, pues su familia y la mía vivían prácticamente en la misma manzana en pleno corazón de Comala, y cuando el ex presidente municipal Eduardo Morales Valencia (papá del actual alcalde Sergio Agustín Morales Anguiano) me invitó como director de Comunicación Social, coincidí con el profesor Jaime, quien era el secretario del Ayuntamiento, y desde ese tiempo surgió una hermosa amistad que prevalece hasta hoy.

Gracias a Marichuy Valencia Salazar, directora de Turismo y vocera del Ayuntamiento, recibí este martes un correo del profesor Rubén Jaime, actual Cronista Municipal, el siguiente texto titulado “Historia del Municipio de Comala, parte 1”, que por ser de interés general, transcribo íntegro (esperando recibir por supuesto las partes faltantes), con mi reconocimiento al esfuerzo tanto del autor como de la administración municipal, por difundir nuestra historia como pueblo. El texto es el siguiente:

HISTORIA DEL MUNICIPIO DE COMALA, PARTE 1
El Municipio de Comala se encuentra comprendido, para el estudio de la época prehispánica, en el área que los arqueólogos han denominado Mesoamérica, quedando ubicado en la mayor de esas zonas del occidente de nuestro país, espacio éste que lamentablemente ha sido poco estudiado por lo que presenta dificultades para su conocimiento.

Por los hallazgos de cerámica se sitúa a Comala en el grupo “La Capacha” que ha sido fechado alrededor de 1450 años a. de C. y el de “Los Ortices” que se inicia hacia 300 – 200 años a. de C.

También las muestras cerámicas localizadas en el municipio son testimonios del paso o estancia temporal de diferentes culturas como lo fueron:

Los Otomíes, de 250 a 750 años d.C. Toltecas de origen Náhuatl, de 900 a 1154 años d.C. La Tolteca – Chichimeca, de 1154 a 1428 años d. C. Los Olmecas, después de la destrucción de Tula, ocurrida en el Siglo XII.

Los Otomíes florecieron en buena parte de esta región, prueba de ello es la existencia de estas raíces en la comunidad de Zacualpan.

También es evidencia la presencia de Toltecas – Náhuatl – Chichimecas, principalmente en algunos espacios de la Cabecera Municipal y Suchitlán, época ésta a la que se le ha dado en llamar Clásica.

Es de mencionarse el existir influencia, en esta región, de la cultura tarasca, principalmente a la llegada de los españoles. Testimonios de las primeras etapas:

ARCAICA

Figurillas conocidas como “monos crudos” o sea hechas de barro mal cocido, ollas pequeñas, vasijas – efigie y miniaturas, así como vasijas de boca amplia o compuestas por dos recipientes, bien sea colocados uno encima de otro o unidos entre sí por dos o tres fragmentos de barro.

Este tipo de cerámica proviene, por lo general, de los llamados entierros sencillos o “pobres”, como lo dicen los moneros.

CONTINÚA…