ENTRE LÍNEAS

Administrador Colimapm | Opinión | 31/01/2022

POR: Raúl Merced Lares

EL ACUERDO que establece las medidas sanitarias a aplicarse en semáforo estatal epidemiológico en naranja, publicado el 31 de julio del 2021 en el Periódico Oficial “El Estado de Colima" y aún vigente, establece en su quinto artículo: “En semáforo epidemiológico color naranja, los establecimientos como bares y salones de fiesta deberán permanecer cerrados; asimismo, se suspende la realización de eventos masivos, incluidas peleas de gallos, jaripeos, fiestas patronales, eventos de ligas deportivas, deportes de equipo y deportes de contacto”. Se supone, entonces, que deben suspenderse las fiestas de Tecomán y los festejos charro-taurinos no deben de iniciar al menos antes del 13 de febrero, cuando culmina el semáforo naranja que acaba de decretar la Secretaría de Salud estatal. También debieran suspenderse otros eventos masivos, fiestas y demás que generen grandes aglomeraciones.

TODAVÍA EL pasado viernes, el director del Instituto de Festejos Charrotaurinos y Exposiciones de Villa de Álvarez, César Gaitán, informaba que el Grupo Técnico Covid ya había aprobado la realización de dichas fiestas y que incluso ya se había aprobado la convocatoria para la primera cabalgata nocturna. ¿Por qué la premura? El funcionario y la presidenta municipal de la Villa sabían que la Secretaría de Salud decretaría el domingo si el estado seguía en amarillo, si coincidía con el verde que decretó hace una semana el gobierno federal para Colima o si nos íbamos al naranja (riesgo alto), que es lo que finalmente pasó. Es sospechoso el empeño o el interés en realizar los festejos por encima de cualquier riesgo para la salud de la población. ¿Por qué? ¿No es primero la salud y la vida de la población? ¿Acaso no lo pregonan? 

TAL INSISTENCIA por llevar a cabo los festejos charro-taurinos por parte del ayuntamiento de la Villa y, así, generar concentraciones que representan un riesgo de contagio contrasta con la postura responsable del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Colima que dirige Héctor Arturo León Alam, quien anunció que debido al incremento en los contagios de Covid-19 se aplazó la comida-baile que se había planeado para celebrar el 49 aniversario de este  Sindicato y sólo se realizará el próximo martes un evento para la entrega de estímulos de antigüedad. Bien por Héctor al anteponer la salud de los trabajadores y sus familias. 

EN ESTOS momentos hay tres poderosas razones para seguirse cuidando o cuidarse del Covid-19 si no lo ha hecho: 1. Subió a naranja el Semáforo Epidemiológico, por lo que es alto el nivel de riesgo por Covid-19 en el estado; 2. La variante Delta (más letal) es la que predomina en el estado al registrar más casos que Ómicron (más transmisible) en la entidad, cuando se cree lo contrario, y 3. En este mes de enero se han registrado más de 700 casos en un día, por lo que otra vez aumentaron considerablemente los casos activos y en el lapso de un mes pasamos del verde al naranja en el semáforo epidemiológico. Por todos lados se indica que el riesgo de contagio se ha incrementado. Hay que cuidarnos más, mientras la situación se estabiliza. 

UNA MÁS en el cochinero que hicieron morenas y morenos para reunir las suficientes firmas para la realización de la consulta sobre la revocación de mandato: El viernes pasado se llevó a cabo el ejercicio de revisión domiciliaria, para verificar que la ciudadanía realmente otorgó su apoyo, y de un universo de 2 millones 845 mil 634 (que fue el corte al 17 de enero pasado), se tomó una muestra de 850 personas en todo el país, para preguntar si efectivamente otorgaron su firma para apoyar la realización del ejercicio ciudadano. El Registro Federal de Electores dio a conocer que se localizó solamente a 645 y 205 no fueron encontradas en los domicilios; de las 645 personas que sí se localizaron, 161 (25 %) informaron que no firmaron para respaldar el ejercicio. Y fue sólo una muestra. Es obvio pensar que miembros de las organizaciones morenistas falsificaron firmas y reportaron que decenas de miles de personas firmaron para apoyar la consulta, cuando no fue así. El INE tendrá que seguir muy alerta -como hasta ahora- para detectar las mapachadas que eventualmente harían morenas y morenos el día de la consulta.

COINCIDENCIA o no, pero apenas opinaba en mi anterior colaboración que era necesario que los periodistas pidieran la revisión de los protocolos de protección, cuando el pasado jueves el presidente López Obrador informó que el Gobierno de México empezó un proceso de revisión de los mecanismos para la protección de periodistas y luchadores sociales y agregó que se buscará un acuerdo con los gobiernos estatales para profundizar en este tema tan importante. En lo particular, insistimos en que debiera darse una preparación a los periodistas que tengan un riesgo tangible de sufrir alguna agresión debido al tipo de información que manejan.

DESDE LA óptica torcida y tendenciosa del presidente López Obrador, la denuncia que presentaron familiares de personas muertas por Covid-19 en contra del subsecretario de Salud es producto de la politiquería. En respuesta, el abogado Javier Coello Trejo dio a conocer que ya son 2 mil personas que se han sumado a esta querella por posibles omisiones en el manejo de la pandemia en México y que se va a llegar hasta las últimas consecuencias. Esto va para largo.

MI SINCERO pésame a mi comadre Lupe y a sus hijos por el fallecimiento de mi compadre Beto Medina Soto. Los recuerdos regresan a mi época de cronista deportivo, cuando nos conocimos y disfrutamos buenos momentos de amistad y de convivencia desde el Diario de Colima y a través del Club de Reporteros de Colima. Vaya un abrazo también para Efraín, Horacio y Arnoldo, mis compadres de facto. Un abrazo para todos de mi parte y de mi esposa e hijas. Hasta luego Compadre.