BITÁCORA REPORTERIL

Administrador Colimapm | Opinión | 07/09/2021

LA MAMÁ DE GERMÁN

POR: César Barrera Vázquez

Germán fue asesinado a sangre fría el pasado mes de mayo del 2019, durante un asalto a un kiosco en el municipio de Manzanillo. Un crimen bestial, inhumano, porque lo mataron cuando ya les había entregado el dinero. Porque no solo mataron los sueños de Germán de seguir estudiando, sino también los sueños de su madre y sus familiares.

Recientemente, la madre de Germán expuso que la fiscalía del estado le quiere dar carpetazo al asesinato de su hijo, sin hacerle justicia a él y a la sociedad, agravada por este crimen nefasto. Quieren cerrar el caso porque, dijo, el viernes pasado una juez consideró que no había pruebas suficientes para acreditar el delito de homicidio al único acusado de este crimen.

Sí este no fue, inquiere la madre de Germán, ¿dónde está el culpable? Y es que en dos años de audiencias, investigaciones, trabajo de la fiscalía, del ministerio público, en todo ese tiempo no se pudo acreditar, con pruebas fehacientes, la culpabilidad de este sospechoso.

No se pudo sustanciar las acusaciones a pesar de que hay imágenes del homicidio de Germán, que se difundieron a nivel nacional el video de su muerte a sangre fría, de que el vehículo en el que viajaron los perpetradores y su dueño está plenamente identificado, esta  persona -el único señalado por este homicidio, no obstante que tres personas más viajaban en ese vehículo-- salió libre.

Y no, no se trata de llevar a un inocente a la cárcel. Está el inviolable derecho a la presunción de inocencia. Pero sí de dar voz. Porque sabemos de las insuficiencias de la fiscalía en materia de integración de las carpetas de investigación, que el 95% de los actos delictivos denunciados quedan en la impunidad, sin castigo contra los que violan, matan y roban.

El caso de Germán, para las autoridades, es otra estadística, otro hecho impune. Y claro, como dice la madre de Germán, es una injusticia, un crimen que lastima a la sociedad y mina la confianza hacia nuestras instituciones, cada vez más desprestigiadas.

Y es que los ejemplos se acumulan. Recordemos a Mayra Jazmín, una joven estilista, de tan solo19 años, cuyo cuerpo fue encontrado en las inmediaciones de la carretera de Jalipa, presuntamente plagiada y asesinada por agentes de la policía municipal de Manzanillo.

¿Cómo recuperar la confianza en nuestras autoridades? Porque si bien es cierto que la inmensa mayoría cumple con su trabajo, por unos poco, los menos, la imagen de la institución queda por los suelos. Que el caso de Germán y Mayra no se pierden en los números de las estadísticas de la impunidad.

DOS PUNTOS

Recientemente, la FGE detuvo a dos personas involucradas en el homicidio del activista social David Díaz, quien por años denunció la contaminación de la termoeléctrica en Manzanillo en la comunidad de Campos.  El asesinato ocurrió días después de que salió de prisión, donde estuvo encarcelado –un juez consideró que sin fundamento—por casi nueve meses. Esperemos que en este caso, a diferencia del de Germán, sí se integre bien la carpeta de investigación y se muestre plenamente la responsabilidad de quienes lo asesinaron o participaron en este crimen.