
*Fue demolida casi en su totalidad *El edificio y la capilla se encuentran protegidos como edificios históricos y culturales de la entidad *Se presentarán denuncias ante la FGR contra quien resulte responsable
Luego de tener conocimiento que el excolegio conocido como de ‘Las Adoratrices’ estaba siendo demolido, este viernes personal perteneciente al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Colima, se hicieron presentes en el lugar para frenar la demolición señalando que parte del edificio y la capilla se encuentran protegidos como edificios históricos y culturales de la entidad.
Y es que este viernes, particulares iniciaron con la demolición de lo que era la capilla del excolegio, por lo que personal del INAH Colima clausuró la obra y detuvo la demolición, aunque gran parte de la capilla fue demolida, por lo que se presentarán las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General de la República contra quien o quienes resulten responsables.
De acuerdo con le director del Centro INAH Colima, Julio Ignacio Martínez de la Rosa, el edificio que se pretende demoler fue parte del exconvento que se erigió en el siglo XIX, en tanto la capilla se construyó en el siglo XX, pero su valor cultural fue por la intervención que tuvo del artista colimense Alejandro Rangel Hidalgo.
Martínez de la Rosa consideró que la demolición que se pretende hacer “es un atentado a la cultura y el patrimonio que está consumado porque derribaron los dos. Las consecuencias se van a analizar desde el punto de vista jurídico, por lo pronto lo que tenemos que hacer es si el Ayuntamiento de Colima autorizó o no”.
También advirtió que estaba la presencia de personal del Ayuntamiento, junto con elementos de la Dirección de Seguridad, Tránsito y Vialidad del municipio, quienes permanecían a distancia de la intervención que hizo el INAH Colima.
Este edificio se encuentra en la esquinas de las calles General Núñez y Aldama, en el centro de la capital del estado, en donde el dictaminador del área de Monumentos Históricos, Luis Manuel Cárdenas, explicó que sólo existía un permiso de demolición parcial el cual protegía los dos edificios que demolieron.
Por su parte el Jefe Jurídico del INAH Colima, Alejandro Chávez, informó que se trató de un daño al patrimonio cultural e histórico protegido, por lo que se ejecutó una suspensión de obra e iniciarán las denuncias ante la Fiscalía General de la República contra quien resulte responsable.
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