POLÍTICA AL DESNUDO

Administrador Colimapm | Opinión | 12/03/2020

POR: Nonantiz Medina de la Helguera

#YoSiTeCreo

Las manifestaciones de alumnas y ex alumnas que se han dado en la Escuela Secundaria Federal Enrique Corona Morfín, en contra de docentes a los que acusan de acoso sexual, conductas no apropiadas, de tocamientos, y de diversos delitos en contra de ellas, me han enchinado la piel, en donde me ha dado emoción, ver que ellas han tenido el valor de expresarse públicamente, de gritar lo que no consideran correcto.

También me ha removido muchos recuerdos, que muchas veces hemos querido callar en nuestro propio subconsciente, me han hecho recordar que como mujer a lo largo de mi vida escolar y laboral también fui víctima de este tipo de actos, pero que lamentablemente tuvimos que callar, por miedo.

Si, por miedo, miedo a que no nos creyeran, miedo a que nos acusaran de revoltosas, miedo a que nos bajaran las calificaciones, miedo a que nos dijeran que nosotros éramos las culpables, porque teníamos que respetar al cien por ciento a los maestros y sus acciones, o simplemente, porque nos hacían sentir que éramos menos que ellos y que teníamos que aguantar todo.

Reconozco que aplaudo las acciones emprendidas por estas alumnas de secundaria, sé también que gracias a los movimientos que en los últimos días y meses se han estado llevando a cabo en todo México y que muchos han tratado de descalificar, dejando a un lado ciertas acciones que no representan lo que como mujeres queremos decir, permitieron que estas jóvenes se decidieran a alzar la voz, sentirse protegidas, apoyadas y que no serían señaladas.

También aplaudo a los jóvenes que ayer y hoy en esas manifestaciones pudimos ver apoyando a sus compañeras, gritando consignas junto a ellas y levantando pancartas.

Eso es ejemplo claro de que el pensamiento de las nuevas generaciones está cambiando, que no se busca, como algunos grupos feministas intentan señalar, que es una lucha de mujeres, no, no, es una lucha de todos los ciudadanos que estamos hartos de callar las injusticias, de estar cansados de tanta violencia, de permitir que nos sobajen en todos los sentidos, de decir Basta, de ya no aceptar que se esté violentando la integridad física de las mujeres.

Definitivamente estos hechos serán parteaguas en todo el estado, no dudamos que pronto varias escuelas de todos los niveles escolares iniciarán con movimientos y acciones similares, en donde darán cuenta que algunos docentes, sintiéndose protegidos y superiores, cometen ilícitos que afectan no solo el aspecto físico de las mujeres y hombres, sino también su integridad moral y afectan psicológicamente.

Desde mi trinchera seguiré apoyando este tipo de acciones, seguiré participando en los movimientos y aunque continúen voces burlándose y criticando, actividades como Un Día Sin Mujeres, gracias a muchas mexicanas, “se abrió la caja de Pandora” y esto será cada vez más grande, en donde no se continuará permitiendo que se violen los derechos de todos los mexicanos en cualquier ámbito y lo más importante es que como mujeres no permitiremos nunca más el ser consideradas como seres inferiores.

Seremos voz de las que ya no pueden hablar, seremos voz de quienes aún tienen miedo de hablar, seremos voz de nuestro consciente y subconsciente de ya no permitir violencia de todo tipo en contra de nadie.

Simplemente exigiremos #NiUnoMás