Pergamino balompédico

ALEX CARBAJAL BERBER | Opinión | 26/05/2011

PREVIA CHAMPIOS

Acabamos de ver, no puedo decir con entero convencimiento “disfrutar”, una final de futbol mexicano entre Pumas y Morelia. Ninguno de los dos partidos, ni el de ida o el de vuelta, lograron encender los ánimos con un futbol verdaderamente espectacular; de no haber sido por Javier Cortés, la final mexicana tendría pocos detalles memorables.

Pasaremos de un futbol en el que Francisco Palencia, a sus 38 años de edad, la sigue “rompiendo”, al previo de un partido que, como consecuencia del bajo nivel local, nos tiene esperando con ansias, como es la final de la Liga de Campeones de Europa, entre el Manchester United y el Barcelona.

Los mexicanos tienen su corazón en el Man United del “Chicharito”, sin duda. Salvo los verdaderamente barcelonistas, los corazones nacionales están entusiasmados con la idea de que un connacional pueda ser la auténtica figura en una final de Copa de Europa, aquél que fuera el viejo sueño frustrado de Hugo Sánchez.

El mismo Samuel Eto´o –quien fuera héroe culé en las dos finales que disputó- ha dicho que el partido se definirá, para alguno u otro bando, ya sea mediante Lionel Messi, o con una actuación destacada del mexicano.

Vayamos por partes. En la portería, ambas escuadras están bien resguardadas. En defensa hay un punto clave: veremos si Pep Guardiola puede utilizar su formación defensiva idónea (Alves-Piqué-Puyol-Abidal), la cual le da más libertades y aumenta la seguridad de su zaga. En las últimas fases, Guardiola se ha visto obligado a experimentar con la pareja de centrales, y sobre todo con el lateral izquierdo.

Ambos sectores del medio campo son muy fuertes. El conjunto inglés tiene una circulación de pelota similar a la del Barcelona, pero las diferencias al alza están del lado culé; si vamos por genialidades, están más del lado blaugrana que en el medio campo inglés.

En el ataque es donde ambos equipos se dan al tú por tú. Messi es el mejor jugador del mundo, aunque Rooney se ha acercado mucho en productividad durante la última temporada. En cuanto a arietes, “Chicharito” no le pide nada, al menos en velocidad, a David Villa. El ex Valencia es más experimentado, sin que eso sea algo determinante en una final a un solo duelo.

Si “Chicharito” se proclamara héroe en esta final, equipararía la gesta de Patrick Kluivert, quien con 18 años dio el gol del triunfo al Ajax en 1995, para pasar así directamente a los libros de historia.

El Barcelona llega, ligeramente, como favorito a esta final europea. Intentará, ante un duro cuadro inglés, recuperar el título perdido hace un año ante el catenaccio del Inter, cuando aún podía autonombrarse el mejor club del mundo.