LA PANGA

MAYAHUEL HURTADO | Opinión | 17/08/2017

EL SALVAJISMO MINIBUSERO COBRA VIDAS

Recientemente se informó que las condiciones del transporte público mejorarían y que habría nuevas unidades para brindar un mejor servicio. También se habló, de inspectores de rutas, de choferes conscientes, de itinerarios que garantizaran seguridad y que los choferes contarías con las prestaciones de ley para que se esmeraran más en el trabajo.

Lamentablemente en la última parte, la que se refiere a los choferes no se cumplió, y es que no puede dársele una unidad de transporte público a cualquier persona, debe existir un minucioso proceso de selección e incluso, exámenes que nos digan que las personas que están frente al volante pueden desempeñar su trabajo sin poner en riesgo la vida de los usuarios, los transeúntes o los automovilistas.

Hace un par de semanas, reporte al servicio de emergencia 911 el hecho de que un minibús prácticamente me echó el camión encima para meterse a un carril, venía zigzagueando en las tradicionales corretizas como ellos les llaman, para ganar pasaje y en otros casos, para llegar a tiempo al punto de itinerario, pues si no lo hacen son sancionados.

Por suerte logré esquivar al automotor y casi me subí a la banqueta y justo en el semáforo que se encuentra por el boulevard Miguel de la Madrid conocido como el de Soriana, me emparejé y le dije que fuera más consciente y responsable, que por poco y me mata unos metros atrás. La respuesta fue violenta, yo no hice caso y seguí mi curso y un poco más adelante, al mirar el retrovisor era el chofer de ese minibús, (el 175 que cubría la ruta 12, el 24 de julio del 2017), quien prácticamente me quería chocar en la parte trasera de mi auto. Aceleraba y me aventaba las luces, jugaba con el clucht que hace un sonido como de aire y frenaba constantemente casi al tocar mi vehículo.

Logré salir ilesa y subirme al carril central aunque tuviera que dar vuelta ya no pude hacerlo, iba tan rápido el minibús que no tenía opción. Otras personas no corrieron con la misma suerte, como sucedió el pasado sábado, en donde un minibús o camión urbano, como usted guste llamarlo, le quitó la vida a dos mujeres, dejando en la orfandad a dos familias. Y es que, la imagen que se difundió en los diferentes portales de noticias muestran a un camión de la ruta 2 sobre el carril central del boulevard costero Miguel de la Madrid, cuando saben perfectamente los choferes que deben transitar por los carriles laterales, y los testigos del accidente que se encontraban en el lugar refirieron que el conductor del camión venía a exceso de velocidad y se robó la luz roja del semáforo, motivo por el cual impactó de frente al auto compacto en donde viajaban dos respetadas maestras.

Pude estar en el velorio acompañando a los familiares y pude comprobar la magnitud del daño que ocasionó este chofer irresponsable a las familias agraviadas. Pues no sólo eran unas excelentes trabajadoras de la educación, sino además eran una familia ejemplar, misma que se fracturó por el grado de irresponsabilidad que impera en un porcentaje considerable de los choferes que circulan a diario en las vialidades de Manzanillo. Las redes sociales estallaron en contra del responsable de las dos muertes que se pudieron evitar si se hubieran respetado los reglamentos de vialidad.

A continuación le muestro el mensaje que invadió los grupos de whats app y los muros de Facebook: “El camionero asesino puede quedar libre… Da coraje que la justicia en este puerto sea tan estúpida, da coraje que un imbécil egoístamente le arrebate la vida a dos personas, ¿Pruebas? 1.- El cafre iba por un carril que no debía. 2.- Se pasó un alto. 3.- Iba a exceso de velocidad, arrastrando a un carro 50 metros. 4.- No contaba con licencia de conducir. 5.- El camión no tenía seguro. Creen que el pueblo es tonto?, ¿sabían que el conductor es hermano del dueño del camión?, ¿sabían que inventaron un pseudo sindicato para defenderlo? No defiendan a un asesino señores. Mataste a dos personas, no sólo eso, dejaste sin mamá y sin abuelita a un niño inocente, dejaste a dos hombres sin esposas. Destruiste una familia joven, debes estar encerrado, este homicidio es tu culpa”.

Realidad o mito urbano lo que dice el mensaje, por lo menos, miles de personas ya lo leyeron y se sienten inquietos con la información que ahí se difunde. Se debe de investigar seria y responsablemente el accidente en el que murieron la maestra Lilia Cabrera de Benitez y su hija Anali Virginia Benítez Cabrera. Se deben de endurecer las penas para quienes conducen de manera salvaje unidades del servicio de transporte urbano. Es el momento en que los legisladores locales deben abundar sobre el tema  y dejando de lado los conflictos de partidos políticos, ponerse a trabajar en las muertes ocasionadas por la manera irresponsable en que conduce un chofer. Quitar el derecho a fianza sería un buen comienzo, porque en el tabulador legal, la vida de nosotros, querido lector, lectora, resulta muy barata, quizás por eso rápidamente depositando una fianza pueden salir libres en lo que se hacen las investigaciones, mientras que en otros casos los vemos conduciendo de nuevo. ¡Ya Basta!