LA PANGA

MAYAHUEL HURTADO | Opinión | 09/08/2017

DEFENSA DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO NO DEBE SER DE DIENTES PARA AFUERA…

Durante años he leído, visto y escuchado gran cantidad de libros y/o textos de índole legal, psicológico, policiaco, periodístico, forense, entrevistas, documentales, programas de televisión, sitios en internet de México, América, la Unión Europea y países de Asia y Medio Oriente, en donde he aprendido algo, quizá mínimo para lo que representa el universo de lo que es la Violencia de Género.

Es donde pude percatarme que la mujer es el ser humano más violentado en el mundo, el más cuestionado o calumniado y también el que pese a los “avances en materia de género” ha sido incapaz de erradicar los diferentes tipos de violencia que en diferentes partes del mundo se cometen a diario, a cada hora, a cada minuto, a cada segundo en contra de alguna mujer, sin importar la edad, raza, religión o condición social.

Y es ahí donde se han generado verdaderos movimientos en favor de la mujer, que buscan de la manera más transparente, mostrar la crudeza de la violencia de género a través de la violencia física, verbal, psicológica, sexual, económica, y la que sabemos que aún no tiene nombre, pero se practica a menudo, me refiero a la violencia de una “mujer” a otra mujer.

Y es que me pregunto, ¿Acaso no es suficiente lo que como mujeres soportamos siendo víctimas de violencia de género propinada claro está por el sexo opuesto, cómo para todavía ser víctimas de violencia generada por una mujer?

Lo más grave del asunto es que desde la adolescencia comienzan esas manifestaciones de odio intragénero y ocurre en aquellas riñas en que alumnas de secundaria, bachillerato universidad han subido a las redes sociales. Y cómo olvidar aquellos casos en los que de la manera más baja y con falsedad de dichos, se ha calumniado a una mujer exponiéndola al odio y repudio social, afectando a su círculo cercano que en las redes sociales tiene que soportar de manera silenciosa, los ataques continuos y alevosos, de que quien con un conocimiento de la ley  y temas de mujer a modo, ajusta a placer las circunstancias, para pasar de agresor al plano victimario.

Y no lo digo yo, hablaré de casos que son más avanzados y es que en México vamos tejiendo la lucha contra la violencia de género, mientras que en la Unión Europea se vive con tal intensidad que han endurecido las leyes y fortalecido la investigación y aportación de pruebas en un juicio de presunta “Violencia de Género” para determinar si el señalado es culpable.  Es  Adolfo Alonso Carvajal abogado especialista en Derecho de Familia, Civil y Penal, y doctor en Derecho, con una tesis sobre los derechos fundamentales en materia de "sustracción interparental de menores", secuestro de niños y niños desaparecidos; quien ha trabajado tanto en España como en la Unión Europea, el mundo árabe, Australia, EE UU o Latinoamérica dictando conferencias acerca de la familia, de violencia de género y organizador de jornadas y congresos y creador de la teoría del "Derecho del Límite", le ha dicho al mundo que existen falsas denuncias de violencia de género:

“Pero ha saltado a la prensa que existe una trama de abogadas que se dedicaba a poner denuncias de violencia de género falsas. Con todos los respetos para el medio que lo publica, no me lo creo. Y me explico y matizo que no es defensa corporativa a mis compañeras, sino sentido lógico. Las compañeras eran las letradas de la Asociación de Mujeres progresistas. Al parecer aconsejaron a una cliente introducir hasta siete denuncias presuntamente falsas de violencia. Están siendo investigadas, ellas, la clienta, una psicóloga y alguna otra persona más, imagino pero no lo sé, que la propia asociación. Sí creo que se ha forzado en general en muchas ocasiones la utilización de los juzgados de violencia contra la mujer con fines ‘espurios’. 

Es cierto por otro lado que cuando uno defiende a un hombre, siempre cuenta con la posibilidad de verse en un momento dado metido en una denuncia de violencia contra la mujer, y que ha habido una indudable tendencia a utilizar de manera extralimitada las hipotéticas ventajas civiles que suponen los Juzgados de violencia contra la mujer. Eso lo que ha hecho es perjudicar el intento de protección a la mujer maltratada, y rebajar el grado de credibilidad; por otra parte sale gratis denunciar a alguien. Es decir no tiene consecuencias posteriores”.

Hasta ahí la transcripción amable lector, lectora, recordé algunos casos de violencia de género que pude conocer a detalle la investigación y resultados a lo largo de mi vida. Pude conocer personalmente a Cristina Michaus, por mucho una activista en pro de la mujer, conocida por el cortometraje acerca de Las muertas de Juárez que le dio la vuelta al mundo, ella me comentó que cuando lo vieron en España simplemente se sorprendieron de que México ya estuviera envuelto en actos de la máxima expresión de violencia como lo es el feminicidio. Tengo el agrado de citar el  trabajo de Rosi Orozco, una incansable luchadora contra la “trata de mujeres” que ha puesto en riesgo su propia vida al levantar la voz en favor de la mujer. Cómo dejar de mencionar a la Doctora Elizabeth Torres Villanueva una mujer que aparte de defender las riquezas culturales de México a través de la danza autóctona, ha sido una defensora de los derechos de la mujer y una activista encomiable que dirige a las mujeres al empoderamiento. Esas son las mujeres entre otras muy destacadas, que dirigen globalmente a las mujeres.

Es por ello que la defensa a las mujeres debe ser abanderada por personas que acrediten en la practica un respeto a la dignidad de la mujer. De nada sirven mil talleres y acudir a trescientas conferencias si no te ha quedado claro el concepto sororidad, mismo que tiene sus orígenes en la antropóloga mexicana Marcela Lagarde quien acuñó este término para describir la situación de las mujeres en Ciudad Juárez, y es ella una de las principales referentes en la defensa del término sororidad, que se refiere a una dimensión ética, política y práctica del feminismo contemporáneo. Se deriva del latín “soror” que significa “hermana”. Sororidad es un término utilizado para referirse a la hermandad entre mujeres con respecto a las cuestiones sociales de género. 

Compromiso muy fuerte en el que ni de broma, ni de forma verbal o escrita, con calumnias a través de redes sociales ni diversos medios, círculos sociales, presionando a la justicia para que determine una denuncia improcedente, abusando de una condición social bien sea como representante de un organismo, asociación o grupo, o pretendiendo proyectar una imagen falsa de víctima para inculpar a otra; nuca permitirá la sororidad atentar, atacar o agredir una mujer a otra mujer.

Si se cuidan los perfiles que lideren organismos, instituciones, asociaciones y activismo Femenino, estamos por buen rumbo, de lo contrario, la lucha contra la violencia de género seguirá siendo de los dientes para afuera.