PARACAÍDAS

ROGELIO GUEDEA | Opinión | 22/06/2017

CORRUPCIÓN MEDIÁTICA, INSEGURIDAD Y OPACIDAD GUBERNAMENTAL

De continuar la inseguridad en ascenso como hasta ahora, este mes de junio se podría convertir en el de mayor violencia en lo que va  de la gestión del gobernador Nacho Peralta, quien no ha encontrado la fórmula (tal vez porque ni siquiera la ha buscado) para acabar con tantos crímenes como padecen los colimenses, los cuales han escalado ya a niveles nunca antes vistos. Como esta inseguridad creciente se empieza a empalmar con los tiempos pre-electorales (las definiciones de candidatos, estrategas comiciales, etcétera), entonces el gobierno ha tenido que recrudecer el cerco mediático (a través de sus medios de comunicación aliados) a fin de generar la percepción de que la enorme violencia que vivimos es un mero espejismo o, en todo caso, una pura invención de los detractores del Ejecutivo estatal, cuando en realidad no es así. Desde que inició la gestión del mandatario Nacho Peralta, quien, debido al fraude electoral cometido no consiguió legitimar su administración ante una sociedad cada vez más crítica, la violencia ha ido en aumento y tanto los crímenes como los delitos que se comenten a diario (asaltos, extorsiones, robos) han terminado por poner a la ciudadanía contra la pared, sobre todo por los altos índices de impunidad a los que también hemos accedido. No sólo ha sido completamente errática la estrategia contra la inseguridad en nuestra entidad, también ha sido errática la forma de tratarla mediáticamente, pues, según una denuncia hecha por el líder de Movimiento Ciudadano en Colima, Locho Morán, y documentada por Diario Avanzada, se han destinado cantidades millonarias a medios de comunicación con los que, además, el gobernador del Estado tiene un serio conflicto de interés, tal es el caso de Diario de Colima, cuyo dueño es tío del gobernador estatal, y quien aglutina en sus páginas editoriales a paniaguados del gobierno (como el propio Pedro Castillo Valdez) para quienes el oficio periodístico no es más que un sistemático recuento de chismes dictados por sus marionetistas. Según la información de Diario Avanzada,  son casi cinco millones de pesos los que ha recibido el dueño del rotativo mencionado desde que asumió su sobrino la gubernatura el año pasado, todo ello desde una opacidad gubernamental que, de tan visible, ha llevado al propio Locho Morán a pedir la intervención de la misma Osafig, a fin de que revise estas millonarias erogaciones, las cuales, dicho sea de paso, podrían destinarse mejor a combatir la propia inseguridad (armando a policías, tecnificando centrales de seguridad, etcétera), o al menos a otros rubros más sensibles: educación, pensiones, atención a las urgencias de los adultos mayores, programas de asistencia para sectores vulnerables. Ojalá que a la denuncia de Locho Morán se unan otras fuerzas políticas a fin de que este perjuicio al erario estatal hecho en el rubro de Comunicación de gobierno del Estado se detenga de una vez por todas e impida que siga causando estragos en rubros sociales que se encuentran esperando salir de su deplorable situación.

rguedea@hotmail.com

@rogelioguedea 

www.rogelioguedea.com