COMM POLITICS

ALEX CARBAJAL BERBER | Opinión | 20/01/2017

LA IZQUIERDA EN COLIMA RUMBO A 2018

Nublado, incierto, es el futuro de la izquierda en Colima, pese a que a nivel nacional el candidato de izquierda por excelencia, Andrés Manuel López Obrador, va viento en popa rumbo a la elección presidencial de 2018, especialmente después de que se hicieran realidad sus vaticinios sobre el gasolinazo y el hecho de que nos iríamos al despeñadero.

El panorama para los partidos de izquierda en Colima se centrará esencialmente en MORENA, cuyo movimiento iniciado hace más de cuatro años sigue sin crecer a la par de otros estados, por varios factores. Uno de ellos es que si consideramos que Colima es una entidad donde hasta hace no menos de 20 años el PRI dominaba todo: los sindicatos, los puestos de trabajo en instituciones públicas, las concesiones de transporte público, el comercio informal en los mercados, y el PAN aglomeraba a prácticamente toda la iniciativa privada, es lógico pensar que los movimientos de izquierda tuvieran poco auge en la tierra de las palmeras, a menos que quisieras arriesgarte a morir de hambre.

Lo mismo pasaba en otras entidades, sin embargo, algunas han evolucionado, la sociedad se ha vuelto más receptiva de partidos políticos de formación reciente, e incluso hay entidades donde la estrategia de las candidaturas ciudadanas sí ha permeado. 

Colima es de las entidades que menos emancipación económica y social ha tenido del PRI, posiblemente, en toda la República. Nuestro estado sigue siendo una entidad donde las mayores opciones de empleo son en el servicio público o en la Universidad de Colima, salvo contadas carreras. Y es un estado donde el PRI nunca ha perdido una elección (bueno, al menos no oficialmente), lo que deja un constante número de profesionistas que después de trabajar “gratis” para el partido oficial en las elecciones, esperan que se les retribuyan los esfuerzos con un puesto en alguna entidad pública, tengan o no las capacidades para ejercerlas; si ya están dentro del gobierno, el trabajo en campaña es una oportunidad para tener un doble ingreso, como lo demostró hace poco el informe del OSAFIG con la lista de “aviadores” y “dobles sueldos” del Gobierno estatal.

Pero antes de entrar en el tema de MORENA, vamos a hablar un poco de otro actor de izquierda, el PRD en Colima. Este partido, en la elección ordinaria de 2003, obtuvo un nada despreciable 15 por ciento en la votación, de la mano de la candidatura de Chucho Orozco, sin embargo, ante la invalidación de aquella elección, se sumaron al pool de partidos que impulsaron al panista Antonio Morales de la Peña, quien finalmente no pudo contra la candidatura del priista Gustavo Vázquez Montes.

En la década en que el PRD en Colima fue controlado por Chucho Orozco, el crecimiento de los amarillos fue apenas sensible, pese a que en 1997 habían ganado la alcaldía de Colima con Carlos Vázquez Oldenbourg. Para 2009, cuando Orozco Alfaro dejó el PRD para convertirse en jefe del Gabinete del gobernador priista Mario Anguiano Moreno, los perredistas ya habían demostrado ser incapaces de subirse al tren de AMLO en la fase previa a 2006, quedando relegados al lugar habitual de las izquierdas en Colima, el olvido.

Después, el PRD no aportó nada significativo hasta que apareció la figura de Indira Vizcaíno Silva, hija de Arnoldo, un pilar del perredismo colimense. Además de joven y guapa, Indira posee una inteligencia que está arriba del promedio de la generalidad de los políticos colimenses, no por nada ganó de calle la elección para  la alcaldía cuauhtemense, cuya buena administración le redituó en que fuera la abanderada más fuerte por la diputación federal de la zona norte de la entidad, que (siendo sinceros) inexplicablemente ganó Kike Rojas. Posterior a eso, cometió un grave error, uno que la distanció de los izquierdistas de Colima quizá para siempre, aceptar un cargo en el Gabinete de Ignacio Peralta.

Ante tan diezmado PRD, sin su última gran figura como lo es Indira, MORENA tiene vía libre de aquí a 2018 para convertirse en el referente de izquierda en la vida política colimense. Obviamente, estarán respaldados por la renaciente candidatura presidencial de AMLO, que se ha visto enriquecida por los agravios sociales que desde la presidencia de la República han orquestado tanto PAN como PRI, en especial el ahora repudiado Enrique Peña Nieto.

Sin embargo, hay algunos inconvenientes; para que MORENA se suba al carro de la abundancia que supone tener un candidato en bonanza como Andrés Manuel, primero deberán dejar de lado sus problemas internos, expuestos en la última visita de AMLO a Colima, donde pidió que todos los interesados en trabajar por MORENA dejaran de lado sus diferencias, o mejor se fueran del partido.

Desde 2012 que hay representación de este movimiento político en Colima, a causa de la salida del Peje del PRD por el tema del “Pacto por México” (ahora conocido como “Chingar a México”), han habido discrepancias importantes en el trabajo interno de MORENA en Colima que le han impedido un crecimiento acorde a lo que han aumentado en popularidad en otras entidades, donde en las últimas elecciones se demostró que la izquierda puede ser segunda fuerza política.

Uno de los motivos que generó la salida de muchos integrantes del concejo estatal de MORENA fue la designación del General Gallardo a la candidatura por la gubernatura de Colima, y lo que finalmente les dio razón a estos “renegados” fue el pobre desempeño del General en la competida elección de 2015, donde MORENA no figuró, al igual que el PRD.

De aquí a 2018, la izquierda en Colima tiene mucho trabajo por hacer. La ventaja para convertirse en referente estatal de la izquierda es para MORENA, recordando que el PT, si bien se dice “el verdadero partido de izquierda”, perdió lo que le quedaba de credibilidad al sumarse a la candidatura de Ignacio Peralta en la última elección extraordinaria.

PRD ha tratado de sumarse a la agenda estatal de temas políticos bajo el impulso de Martha Zepeda, una mujer que es más popular ahora que en su candidatura a la gubernatura, pero sin duda el partido del Sol azteca aún no se ha recuperado del golpe que fue el abandono de Indira Vizcaíno; un golpe de tres bandas, porque debilitó al PRD, debilitó su propia imagen, y además comprobó l teoría de los derechosos, de que la izquierda llega hasta donde puede comprarse.

MORENA tiene un gran reto por delante; es imperativo que en estados como Colima no hagan el ridículo electoral mientras su gran figura nacional sigue en ascenso, pues de ser así, solamente dejarán constancia que el problema no es MORENA, sino los que están dentro del partido en Colima.

PASE DE SALIDA…

Distractores del gasolinazo se están gestando por doquier, pero en el que sí parece que hay línea es en el tema de Trump y su llegada a la presidencia de Estados Unidos. No se deje engañar, los presidentes gringos siempre han tenido muy claro que deben beneficiar precisamente a los gringos, y aunque nos hablen bonito, como Obama, nos ven como su patio trasero. El gasolinazo, orquestado por “mexicanos”, sí es un peligro ya altamente sentido.

PASE DE SALIDA 2…

Hay Rafa Mendoza para rato, y más cuando sus estrategias mediáticas anti gasolinazo le han funcionado a la perfección. Pese a la guerra sucia, y que haya sido calificado como populista, el alcalde de Cuauhtémoc puso en un predicamento a todos los políticos que no han optado por regalar de la gasolina que viene en sus partidas presupuestales, y aunque algunos quisieron sumarse de última hora, no tuvieron el impacto del que gozó Mendoza.

PASE DE SALIDA 3…

En Comala ya están hartos de que los cargos públicos se hayan convertido en un carrusel de los mismos políticos y sus familias. El mejor ejemplo de por qué ya no debe darse este carrusel, es que Comala cada vez es menos funcional, como recinto turístico o como Pueblo Mágico. Por tal motivo, es una gran noticia que se haya conformado el “Consejo Consultivo por la Soberanía Comalteca”, de la que ya dio cuenta en CARVAJALBERBER el columnista Luis Armando Fuentes Valencia. Enhorabuena