TRIBUNA PÚBLICA

GABRIELA RUBALCAVA MENDOZA | Opinión | 25/06/2016

Veamos porque digo lo anterior: la palabra diputado viene del latín Deputatus participio del verbo Deputare (ev aluar, apreciar), el verbo diputar en castellano, no se forma del deputare sino del que significa ev aluar y destinar para un fin, de tal manera que un diputado sería alguien escogido ev aluado y destinado para representar al pueblo, y la verdad, no veo a éste último por ningún lado. En lo que se refiere al sentido de pertenencia que te da la militancia, la formación política, esta como tal no existió jamás en “los tres al legislativo” de allí que sea justificable su actuación inmediata: los mandaron a volar en cuanto pudieron. Los panistas no se pueden llamar a engañados pues antes que a sus correligionarios, prefirieron a ciudadanos que no les garantizaban ningún tipo de lealtad, ni política, ni personal ni partidista, porque simplemente No son panistas. Dos de ellos, incluso, tienen formación priista o son gente de expriistas, verdad Nicolás, Verdad Virgilio? Verdad Jorge Luis? No hay nada que reclamarles, ellos fueron congruentes, se deslindaron una vez asegurado su interés primario: la cartera. Tan tan.

Consultando la Constitución General de la república respecto de las obligaciones y facultades de un legislador, por ningún lado se prevé los beneficios que traerá a los electores, la supuesta “independencia” de sus representantes, más bien pareciera que la repercusión inmediata se vería reflejada nominalmente hablando, como advertí líneas anteriores, pues se entiende que por cada comisión que encabezan los tribunos reciben un presupuesto, quizá ese sea uno de los puntos neurálgicos de esta determinación del grupo de “los tres al poder legislativo”.

Personalmente, no le atribuiría todo lo que pasa en Colima, a Jorge Luis Preciado. Ha demostrado que no es tan brillante como muchos lo concebimos inicialmente en su campaña. Inteligente si es, no se le discute. Encontró a las personas idóneas para “armar” una estructura paralela a la priista, con la cual los combatió en el proceso electoral. De vender artículos electrodomésticos por la calle logró escalar hasta el Congreso de la Unión convirtiéndose en “el sueño americano” de los colimenses golpeados por la crisis y los malos gobiernos priistas. Hasta allí. Nada más. Luego, hay que dejar que estos tres personajes se hagan responsables de sus actos.

Continuo. Yo sí creo que las aspiraciones en política tienen su tiempo y me atrevo a señalar que ninguno de “los tres al legislativo” serán nunca, jamás, quienes encabecen las alcaldías de los municipios de los que emanó su candidatura. Y las razones son sobradas. Una de ellas, es que les falta lealtad, carecen de congruencia política, les hace falta madurar y algunos de ellos ya no tienen tiempo en política. Pero vamos a esperar y veremos lo que ahora le digo.

Finalmente, déjeme le cito textual una parte del artículo 87 de la constitución política local:.. “los presidentes municipales, síndicos y regidores de los Ayuntamientos electos popularmente por elección directa, tendrán derecho a ser electos consecutivamente para el mismo cargo, por un período adicional. La postulación sólo podrá ser realizada por el mismo partido o por cualquiera de los partidos integrantes de la coalición que lo hubieren postulado, salvo que hayan renunciado o perdido su militancia antes de la mitad de su mandato. Las personas que, por elección indirecta o por nombramiento o designación de alguna autoridad, desempeñen las funciones propias de esos cargos, cualquiera que sea la denominación que se les dé, podrán ser electas para el mismo cargo para el período inmediato”..

Deberíamos estar temblando los ciudadanos.