?

CULTURALIA

NOE GUERRA PIMENTEL | Opinión | 15/04/2016

COLIMA, SU TRANSPORTE PÚBLICO

Vamos ya por el primer centenario desde que el primer auto de alquiler empezó a circular por las calles de la ciudad de Colima aquel 16 de noviembre de 1917 (a ciencia cierta no sé de qué vehículo se tratara, pero debió haber sido el más popular de la época y de los primeros que se produjeron en serie, el “FORD T”), un vehículo que era propiedad de Pablo Avalos quien de forma visionaria y copiando de alguna manera lo que ya se estaba popularizando en ciudades grandes como Guadalajara, puso al servicio de los colimenses el primer auto de gasolina y de alquiler, coche manejado por José Mesina, aquel chofer que recorría de punto a punto la ciudad a menos de veinte kilómetros por hora, cuando ni tránsitos y mucho menos semáforos había y las calles en su mayoría eran de tierra y las menos, las principales, apenas con empedrado.

No obstante hay que recordar que en estos rumbos, antes de la llegada de los europeos, es decir cuatrocientos años atrás el transporte era impensable a no ser el de los productos para el trueque y el del pago de tributos de los pueblos o tribus sometidas a las dominantes. Ya con los europeos las cosas cambiaron y los tamemes que a lomo antes solo trasladaban mercancías, desde el siglo dieciséis ya tuvieron que en una especie de silla echarse a sus espaldas a los señores o entre varios cargarlos, mínimo dos, en las llamadas andas, hasta que paulatinamente fueron sustituidos por las bestias traídas por los mismos ancestros provenientes del llamado viejo mundo, y aquí hablamos de equinos, vacunos, entre caprinos y aves de corral.

Luego de más de tres centurias fue el 5 de marzo de 1892, cuando según Francisco Hernández Espinoza inició operaciones el primer transporte público en el área conurbada Colima Villa de Álvarez con los tradicionales "Tranvías de mulitas", con tracción simultánea de tres mulas o sea de “tres caballos de fuerza” y que dicho sea fue protagonista de mortales percances entre los distraídos viandantes que luego no reparaban en la cercanía de aquel armatoste que lento recorría la ruta del Paseo del Progreso, actual Parque Hidalgo al centro de la ciudad subiendo por Revolución hasta entroncar en la Principal ahora Madero y de ahí al poniente hasta Villa de Álvarez. Transporte que en 1929 se modernizó con la adaptación de un motor que les dio vigencia por una década más.

Fue en mayo de 1940, cuando los concesionarios del tranvía de Colima, anunciaron que éstos desaparecerían, pues “eran verdaderos adefesios” (sic). Ofrecieron adquirir en su lugar, “cuatro modernos y magníficos autobuses”, lo que con la constitución de la primera sociedad cooperativa o como se denominó: Unión de Auto-transportes Urbanos, con Gustavo Vázquez H. como presidente y Juan Vargas como secretario de actas y acuerdos, cumplió su palabra y el 14 de septiembre de 1940, los tranvías fueron sustituidos por lo que entonces se inauguró como “servicio de transporte urbano”, consistente en la circulación de unos camiones hechizos con carrocería de madera, los conocidos “chatos”, con el motor a lado del chofer, mismos que al paso fueron sustituidos por los DINA y otras marcas igual que su incipiente organización para quedar como la Sociedad Cooperativa Colima - Villa de Álvarez, que según vio su mejor época en los ochentas cuando con la ampliación de rutas se hizo una importante inversión, quizá la última que se haya hecho hasta hoy, en una flota de camiones nuevos que por lo menos temporalmente fueron del beneplácito de los usuarios.

En 1990, auspiciada por el Gobierno del Estado, tuvimos la irrupción de los llamados “Serpentinos” que se incorporaron al tráfico local y cuyo propósito por su menor tamaño, según la prensa de la época, era para eficientar el transporte público en la zona conurbada, principalmente en las zonas de difícil acceso; lo que no ocurrió con esas unidades que paradójicamente por su capacidad poco a poco fueron reemplazadas hasta ser desaparecidas y sustituidas con vehículos más grandes, en su mayoría hechizos, mismos que a la fecha ya mimetizados con los otros, obra y gracia de sus concesionarios, son los que circulan ineficientes, estorbosos, inoperantes, contaminando y violentando el espacio público. Algo se tiene que hacer y es urgente, antes de que la zona conurbada sea un área intransitable.

The feeling of replica handbags uk is noble and gucci replica , but hermes replica black replica hermes bag will not give this handbags replica. The black Hong Kong-flavored shoulder replica handbags is engraved with a delicate kitten pattern, giving a kind of Playful and cute feeling.