ESPACIO PÚBLICO

ALFREDO VERDUZCO CEBALLOS | Opinión | 18/01/2015

Como miembro de la clase media baja que he sido, soy y seré, a mucha honra, me identifico plenamente con los mercados públicos, con todos, pero en especial con el Pancho Villa y el Álvaro Obregón, que este sábado visite para comprar una porción de buen queso que vende mi añejo amigo, Ricardo Vázquez Lara y alguna fruta en los puestos de las familias Eusebio y Roque, a quienes salude por ahí, como también lo hice con Javier, el cachorro, de la dinastía de los y las Suárez. Todos, como los Lobato, los Martínez, los Novela, los Hernández y los Martínez de la Rosa, entre otros, fueron parte importante en mi adolescencia. De muchos de ellos sigo siendo amigo.

Ahí, en el mercado Obregón, para ganarme unos centavos cargue las canastas de las señoras que diario surtían su despensa, bolee zapatos y alquile cuentos en el puesto de Don Margarito, durante varios años. Fue una bonita etapa de mi vida, porque rentando los cuentos de Chanoc, Kaliman, el Hombre Increible, Lágrimas, Risas y Amor, Batman, Superman, El Valiente, Juan Sin Miedo, Memín Pinguín, Archie, Hermelinda Linda y muchos más, conocí a cientos de niños y jóvenes que al paso de los anos se convirtieron en personas importantes y de mucho dinero. Hasta un joven que fue gobernador paso por ahí cuando estudiaba la secundaria, lo que por el trato posterior parece se olvido cuando fue pobre.

Así es la vida ¿verdad? Pero, les he platicado esta experiencia adquirida en el Álvaro Obregón, para decirles que creo que los mercados siguen siendo un lugar para comer bien, con buen sabor y comprar frutas, verduras y muchos productos mas a buenos precios.

Solo hago una recomendación a los directivos y a los propios locatarios: cuiden la imagen y la atención que dan al público. Y la limpieza es básica, tanto de los puestos como de las personas, porque hay quienes no cumplen con ello. Pero son minoría. Lo he visto directa y personalmente, nadie me lo ha comentado.

Yo seguiré prefiriendo nuestros mercados públicos.

LOS INVITO A QUE LOS VISITEN.

SALUDOS A TODOS, INCLUYENDO A LOS LOCATARIOS POSITIVOS Y TRABAJADORES, LA GRAN MAYORIA.