LECTURAS

NOE GUERRA PIMENTEL | Opinión | 28/04/2013

HISTORIAS DE MENTIRAS

En las últimas décadas, en muchos sistemas educativos de nuestro continente y, principalmente en México, la historia ha sido inexacta, está construida con una visión manipuladora y, en ese sentido, resulta lesiva en la formación de nuestra idiosincrasia. ¿Cómo es posible que en una región que se extiende desde el Río Bravo hasta la Tierra de Fuego, básicamente mestiza, se hable de "exterminio del indígena" durante la Conquista? Con excepciones, claro está, y con barbaridades, los españoles –nuestros antepasados (90% de la gente en México tenemos sangre española)- se mezclaron con los indígenas.

Lo que se debe a que las Leyes de Indias, iniciadas por Carlos V en 1551, llegaron a proclamar la igualdad frente a la ley de españoles e indígenas. Pero, aun así, me ha tocado oír que todo el mestizaje en América Latina fue fruto de violaciones. No, no exageremos, unas de españoles, apenas quinientos individuos en la conquista, no daban para fecundar a miles de hembras indígenas.

Cabría preguntar ¿Dónde están los nativos de Estados Unidos? y ¿Dónde está el mestizaje entre anglosajones e indígenas en las ex colonias británicas? Salvo en contadas ocasiones, éste casi no existió. Allá los indios fueron literalmente exterminados y los pocos sobreviven en “Reservas”. Nadie se mezcló con ellos.

Otro tópico: "Los españoles que vinieron -nunca entendí bien esa expresión, proviniendo de mestizos, en todo caso sería: cuando vinieron nuestros antepasados españoles- fueron todos ex presidiarios o gente que vino por el oro". Yo no dudo que entre los que se embarcaron a "hacer las Américas" (así se dice en España por la segmentación territorial de las tres grandes demarcaciones geopolíticas de América: Norte, centro y sur), hubiera habido de todo.

Ladrones, violadores y tiranos, no faltaron, aún los hay. Lo que dicho entre nosotros me parece masoquista es que olvidemos, gracias a la "leyenda negra", inventada por Inglaterra y continuada por Estados Unidos con su "Doctrina Monroe" y los historiadores decimonónicos y del siglo pasado, que construyeron una “historia patria” fundada en derrotas y fracasos, a la gente valiosa que también cruzó el Atlántico, o aspectos como que la primera Universidad fundada en América fue la de Nueva España, en 1553), cuando Harvard en 1663, símbolo del poder cultural gringo, no estaba en la mente de los bisabuelos de sus fundadores.

Además de eso, desde el primer momento, afloraron por toda la hispanidad: colegios, seminarios, y otros centros educativos: ¿creen que éstos estaban dirigidos y fundados por y para ladrones? No por nada las más grandes y bellas ciudades de virreinato, las más modernas y los iconos del arte y la cultura de la época eran de la Nueva España y no de Norteamérica.

Por otro lado y para cerrar, siempre que se habla de la Nao de China, se da a entender que era un solo barco el que iba y venía desde oriente a este suelo, al cual se le llamaba también "Galeón de Manila", lo real es que más que un solo barco, fue una línea náutica (que no era china ni tocaba puertos de aquel país).

Fue la primera comunicación comercial de la historia con el Nuevo Mundo. Los barcos de aquella flota, tardaban entre 3 y 7 meses de viaje desde las costas filipinas hasta las Novohispanas, y a veces cuando había contratiempos -piratas, ciclones, etc.-, hacían hasta 10 meses en la travesía. En sus escalas de aprovisionamiento por el litoral ahora mexicano, comerciaban desde San José del Cabo en Baja California sur, Bahía de Banderas entre Nayarit y Puerto Vallarta y en Santiago de la Buena Esperanza, original ubicación del hoy Puerto de Manzanillo, Colima, y de aquí hasta Acapulco, donde finalmente vaciaban su carga asiática para surtirse de las americanas.

Estos galeones procedentes de Filipinas (conocidos como "La Nao de China"), fueron durante esos más de dos siglos y medio la base de un importante comercio de importación y exportación iniciado en la segunda mitad del siglo XVI (1565) y prolongado hasta el XIX, cuando el último galeón "Magallanes", partió en marzo de 1815 hacia Oriente, dando por concluida así toda una época de la llamada marina mercante, la de la más antigua línea naviera del mundo.