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LA JIRIBILLA

EDWIN MARTÍNEZ | Opinión | 09/12/2012

Como podemos describir lo ocurrió el pasado sábado en el MGM de las Vegas sin involucrar la pasión y hacer una declaración consiente sin fanatismos. Realmente es difícil quedarse callado al ver una y otra vez el tremendo derechazo de “JuanMa” Márquez a Many Pacquiao y poner fin a más de 40 rounds de dominio filipino sobre el “Dinamita”, para derrotarlo en lo que parece el principio de la debacle, del que no hace mucho era el mejor libra por libra del mundo.

La noche del sábado fue una noche mágica para todos los mexicanos, que aunque aficionados o no a los deportes y en especifico al box, estaban pendientes de lo que pasaría arriba del cuadrilátero y es que para otros tantos era por demás la 4ta pelea y era ya solo un truco publicitario.

Many Pacquiao llegaba con un record de 60 peleas, 54 victorias, 32 de ellas por la vía del cloroformo, 4 derrotas y 2 empates, teniendo el mote del “devorados de mexicanos”, pero con la loza de haber perdido el título superwelter de la OMB en su último combate frente al norteamericano Timothy Bradley, en un combate que a ojos de todos, Many fue el virtual ganador y aunque se recurrió a la OMB para revisar la pelea donde los jueces que la analizaron le dieron el gane a “Pacman”, la decisión fue irrevocable.

Por su parte Juan Manuel Márquez, con 39 años, pero con el orgullo intacto de un jovencito debutante, quería dejar en claro que era él el que podía noquear a Pacquiao y es que en sus 3 últimas peleas los resultados oficiales fueron empate, decisión repartida (para Many) y decisión mayoritaria (para Many), con la sensación de que la 3era pelea era de Márquez y avalando que los resultados dictaban que era el único peleador al que no había dominado.

143 libras para el oriundo del DF y 147 para el de Filipinas en el pesaje oficial, pero con una masa muscular impresionante del mexicano, donde no se notaba las 4 libras de más que tenía Many y donde hasta el momento el primer rival que era la báscula, ya estaba derrotado.

La pelea fue como la esperábamos, intensa y con una excelente estrategia del mexicano comandado por el exitoso Nacho Beristain , contragolpeando en los momentos donde Many dejaba de tirar golpes, no estando estático porque sabía que las dos mazos de su oponente lo podían lastimar y siendo inteligente cuando Pacquiao lanzaba golpes, tan fue así que faltando 2 segundos para que terminara el 6to round, vimos la imagen que todos los mexicanos siempre quisimos ver, un Many Pacquiao fulminado, clavado en la lona, producto de un golpe en el que se unió la fuerza de los miles de compatriotas que anhelábamos el triunfo del “Dinamita”.

Honestamente es una total incertidumbre lo que vaya a pasar con las carreras de ambos. Por una parte Márquez logró y demostró, que al menos en las últimas dos peleas fue superior a su rival y que solo para los jueces y para las casas de apuesta no lo fue. Márquez tiene que pensar muy bien lo que va pasar con su carrera. Lo ideal es que se retire, los mejores años de JuanMa ya pasaron, cada vez es más difícil tener una buena preparación. Ya hizo lo que tenía que hacer, todo México jamás va a olvidar la forma en que derrotó al filipino, aunque aquí hay un as bajo la manga para los promotores. No descarte que la próxima pelea de Juan Manuel Marquéz sea como retador del cinturón superwelter OMB de Timothy Bradley, sí, ese mismo que destronó al mismo Many.

En contraparte, Emmanuel Dapidran Pacquiao, tiene un panorama más claro. Aún le quedan algunos 2 ó 3 años de buen boxeo, pero pareciera que es el principio de la debacle de su exitosa carrera, lo que queda más que claro es que los promotores están tristes, no solo porque perdió su consentido, si no porque le dicen adiós a una posible pelea entre Floyd Maywethwer Jr y el “Pacman” Pacquiao, aunque increíblemente tanto Bob Arum como el mismo Pacquiao dejaron abierta la posibilidad de una quinta pela. HABLAMOS!!!!!!

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