BITÁCORA REPORTERIL

CÉSAR BARRERA VÁZQUEZ | Opinión | 25/08/2019

EL FACTOR MARIO DELGADO

Mario Delgado no quita la mira de Colima: recientemente inauguró su casa de gestión como diputado federal. Este hecho no deja de preocupar a los aspirantes a la gubernatura del estado, tanto de otros partidos, pero principalmente a quienes buscan llegar a palacio de gobierno con las siglas de Morena en el 2021. 

A pesar de ser un político que se ha desenvuelto en la Ciudad de México, donde se desempeña como líder de la bancada de Morena en el congreso de la unión, Mario Delgado sopesa con exactitud todas sus posibilidades. De ahí sus visitas frecuentes al estado de Colima: no pone todos los huevos en el mismo cesto. 

Por eso en una hipotética candidatura a la gubernatura, como en su momento con Socorro Díaz, Fracisco Velazco Curiel, Antonio Barbosa, difícilmente se le podrá criticar no tener arraigo político en el estado, pues su presencia en la entidad legitima cualquier aspiración. Cómo no me va a importar Colima, si aquí vive mi mamá, expresó en una entrevista con reporteros colimenses en su última visita.

Queda claro que el nivel donde se maneja Mario Delgado le da muchas posibilidades para desarrollar su carrera política: como líder de la bancada de Morena, mayoritaria en el congreso de la unión, le da la plataforma para catapultarse a la dirigencia nacional de Morena o, incluso, a una secretaría de estado, con miras a la presidencia de la república en el 2024.

Y lo anterior es verosímil, pues Mario Delgado es uno de los hombres más cercanos a Andrés Manuel López Obrador. De ahí que la gubernatura del estado de Colima sea una posición asequible y figure dentro de sus planes políticos, quizá no como su plan principal, pero sí como una alternativa real. Y eso lo saben sus contrincantes a la gubernatura del estado.

Pero no solamente es cercano, sino que también ha sabido defender, con inteligencia y destreza política, los postulados de la 4T, sobre todo en el aspecto económico, donde más han golpeado al presidente. Es de los pocos actores políticos de la 4T que brilla con luz propia.

Precisamente, son esa clase de figuras políticas, como Mario Delgado, las que necesita el gobierno de Andrés Manuel, pues con argumentos saben defender las causas del presidente, sin incurrir en lugares comunes o en una retórica manida, desgastada y ya estereotipada.

Aquí en Colima su presencia ha sido benigna para Morena: fue un factor clave para darle estabilidad y gobernabilidad al congreso del estado; hay que recordar que cambiaba la presidencia de gobierno interno, en poder de Morena, como calzones, hasta que con la intervención de Mario quedó Vladimir Parra, quien ya rompió el récord, al durar más, de los legisladores morenitas como presidente de la comisión de gobierno interno y acuerdos parlamentarios.

Con eso, queda acreditada la habilidad política de Mario Delgado, al atemperar los ánimos belicosos de todos los legisladores locales de Morena. Y es que si logró conciliar los antagonismos de las y los diputados al interior del congreso local, tiene toda la habilidad para hacerlo a nivel nacional.

Dos puntos

Mi solidaridad con Enrique Gutiérrez y Celina Pinto, quienes fueron agredidos verbalmente por una persona cuando realizaban su trabajo reporteril en el congreso del estado. Los periodistas no sólo nos enfrentamos a malas condiciones laborales y ejercer una profesión considerada las más riesgosa en México, sino que encima de todo eso tenemos que soportar los insultos de grupos refractarios, con claros intereses político-partidistas, que mancillan esta profesión.